Més que una canastreta

Como bien saben los presentes, Clove y el que escribe hemos sido padres. A pesar de no estar casados, vivir en pecado e incumplir con algún mandamiento de algún Dios; nos  hemos atrevido a esta aventura.

“Prepárate para dormir…”, “Te vas a hinchar a cambiar pañales…”, “Te tocará darle biberones de madrugada…”, “No, que se malacostumbra…”, “Debe comer cada 3 horas…”, “Eso es que tiene cólicos…”, “Ponle manoplas para que no se arañe la cara…”, “Déjalo que llore un rato…”,  “Manga larga para los primeros días…”, “Vas a pedir la epidural a gritos…” , etc.

Todas y cada una de estas putas frases (y mas) las hemos tenido que escuchar. Eso sí, nosotros siempre correctos, con una sonrisa en la cara y asintiendo con toda la educación del mundo. Ajá ajá. A ver gente ¿os pensáis que nos hemos metido en esto sin conciencia de lo que nos va a suponer? ¿A caso un bebé es una función matemática? ¿Tenéis la verdad absoluta sobre este asunto? Afortunadamente la respuesta a todas estas preguntas es un NO rotundo. Pero tranquilos queridos lectores, algún día os encontrareis con estas chorradas y os acordaréis de Estado de Derechas.

A lo que iba. Ser padre en Catalunya es maravilloso. Todos dicen que es la mejor experiencia del mundo y no les falta razón. Pero hay una cosa que complementa aun más (si cabe) el placer de ser padre: La Canastilla.  Para los desconocedores, la canastilla es una caja cutre de cartón con productos destinados al bebé y su entorno. Hay cremas, lociones, pañales, revistas, agua, zumo… un sin fin de muestras gratuitas de ensueño. Pero entre todos estos artículos, había algo que me llamó la atención y que me emocionó enormemente:

Mi primer impulso de padre fue plantarme en las oficinas de Sandro y tramitar el carnet de Manuela. El entusiasmo fue tal, que se me olvidó registrar antes a la criatura en el registro civil. Que ignorante que soy, pensaba que hacerla socia del Bar$a era el primer trámite y resulta que antes hay que registrarla en el registro civil.

Fue tal el bajón, que decidí no hacerla socia del FCB. Pensaba que eso de “més que un club” se refería al estatus de país, estado o reino culé.

De todas formas, Manuela se decanta por el hurling y que yo sepa el Bar$a aun no tiene esta modalidad.

(No hay ironía en el texto anterior, pero si la hay en esta misma)